HÉCTOR CASTRO
Federico Trillo-Figueroa y Martínez Conde (Cartagena, 1952) es Vocal Suplente de la Diputación Permanente, Portavoz de la Comisión Constitucional y Vicepresidente Primero de la Delegación española en la
Asamblea Parlamentaria de la OTAN. Fue ministro de Defensa de España (2000-2004) y presidente del Congreso de los Diputados (1996-2000).
Señor Trillo, usted es doctor en Derecho. ¿Qué valoración hace del
Estatut catalán en términos jurídicos?
Nosotros hemos querido colaborar para
hacer un nuevo estatuto para Catalunya que combinara el máximo de autonomía
dentro del marco de la Constitución española. En esta línea hemos conseguido
estar presentes en todos los trabajos, tanto en el Parlament de Catalunya como
en el Congreso de los Diputados en que yo he sido ponente en nombre del Partido
Popular y, de hecho, hay al menos la mitad de los artículos que nosotros
creemos que están correctamente redactados en esa línea. Hay otros artículos,
hasta 114, que por el dictado del nacionalismo más radical, el de Esquerra,
como ha reconocido el propio Maragall, confronta directamente con la
Constitución, la rompe, y quiere convertirse en una Constitución paralela.
Hemos decidido llevarlo al Constitucional porque pensamos que es lo mejor que
podemos hacer por Catalunya para que se dirima por el Tribunal qué artículos
son constitucionales y cuáles no. A partir del momento en que el Tribunal dicte
su sentencia, yo creo que todos tenemos que acatarla, los no recurrentes y los
recurrentes. Los recurrentes no sólo son el PP sino que hay comunidades
autónomas como Aragón, que está gobernada por el Partido Socialista. Es curioso
que el Partido Socialista aquí en Catalunya es acompañante del nacionalismo en
el estatuto y en Aragón es recurrente del estatuto. En cualquier caso, la
sentencia debemos acatarla todos, y no hay que dramatizar tanto como está
pretendiendo hacer algún líder de izquierdas. Si se declaran artículos
inconstitucionales pues se tendrá que rehacer y ahí empieza la política y
nosotros seremos más necesarios que nunca.
Y, ¿cómo cree que actuará el Tribunal
Constitucional con el texto estatutario?
Nosotros hemos fundado nuestro recurso y,
en consecuencia, creemos en los fundamentos de nuestro recurso y esperamos que
resplandezca la verdad y la Constitución. El Tribunal tiene la posibilidad, que
utiliza con frecuencia, de hacer sentencias de carácter interpretativo, de forma
que declara que el único sentido constitucionalmente válido en un artículo es
el que el propio Constitucional dice y, eso, insisto, permitirá rectificar
excesos y, en algunos otros artículos que son manifiestamente
inconstitucionales, pues sencillamente tendrá que anularlos.
¿Cómo definiría el momento actual que vive España?
Mariano
Rajoy lo sintetiza muy bien cuando dice que “es un Gobierno que no resuelve
ninguno de los problemas que tenía planteados España cuando nosotros dejamos el
Gobierno y se dedica a crear problemas nuevos”. Efectivamente así se ve. Nadie tenía un
problema con el vino y se trata de hacer una ley reguladora del vino que,
obviamente, no ha satisfecho y ha tenido que ser retirada, de momento,
probablemente hasta el día de después de las elecciones municipales, porque no
satisface los intereses del sector y confunde, además, el vino, que es toda una
cultura milenaria, con el alcohol de consumo excesivo. Se cree necesario hacer
una ley de paridad allí donde, por ejemplo, en el Partido Popular, no tenemos
ninguna necesidad de que nadie nos diga que la mujer debe de tener un puesto
conforme a su mérito y a su capacidad le corresponde. De hecho, nosotros hemos
hecho nuestras listas y no hemos tenido ningún problema para que haya una equiparación
plena. Hemos sido el partido que más mujeres ha tenido en el Gobierno. Las dos
primeras presidentas del Congreso y del Senado han sido mujeres del partido
Popular. No necesitamos esa ley pero el Gobierno ha tenido que inventar ese
problema, y lo ha tenido. Ha sido una ley en la que se le han impugnado al
propio Gobierno 40 candidaturas y no ha sido capaz de cubrir su propia ley de
paridad. Nosotros tenemos en Lleida, por ejemplo, una secretaria general que es
una mujer, que va de número 2 de la candidatura en lleida. No necesitamos que
nos venga a dirigir la vida del partido el Gobierno con sus leyes, ni los
españoles necesitan que venga a resolverles la vida privada como ahora mismo en
el asunto del BBVA. El Gobierno se
dedica a dirigir la vida de la gente y a no resolver los problemas colectivos;
ésa es la gran paradoja del Gobierno español.
Hace dos días, el presidente del PNV, Josu Jon Imaz, declaró que no
descartaba pactar con Rajoy si el PP ganaba las próximas elecciones generales.
¿Cómo interpreta este gesto?
Como una confesión de naturalidad
política que estoy seguro más tarde o más temprano harán también los dirigentes
de Convergencia i Unió. Porque, eso es lo que pasó en el 96. Y muy
probablemente cuando eso empezó a decirse es porque ven próxima la victoria del
Partido Popular como en el 96.
¿Hay realmente tanta crispación en la
política española como interpreta la sociedad?
La crispación, lo dice muy bien nuestro
candidato Ismael Zapater en su página web, la ha generado el presidente
Rodríguez Zapatero. Es otra de las muchas características de este Gobierno, que
ha venido a crear problemas, insisto, donde no los hay. Yo estoy estos días
visitando muchos puntos de España y yo no he visto esa crispación en ninguna
candidatura del Partido Popular en ningún pueblo de Castilla-La Mancha, ni de
Murcia –mi tierra-, ni de la Comunidad Valenciana, ni Castilla y León, ni de
Andalucía, no la he visto y, desde luego, no la he encontrado hoy en Lleida.
Eso sí, algunos medios los veo radicalizados cada día, cada mañana y cada noche
y, desde luego, en el Gobierno, en cada una de sus acciones.
Desde el Partido Popular critican constantemente la política
antiterrorista del Gobierno. Sin embargo, de momento y que se sepa, no hay
cesiones políticas y, en cambio, no se producen atentados, ¿no puede ser el
diálogo la clave para que desaparezca el terrorismo?
Vamos a ver, son varias preguntas en una
y si me lo permite lo voy a desmenuzar. ¿Cómo que no hay cesiones políticas? ¿Y
qué es la libertad de De Juana Chaos?, ¿y qué son los traslados de presos que
se han verificado? y ¿qué es sino el no recurrir ante el Supremo adecuadamente
ANV como partido que el propio Tribunal Supremo ha dicho que es un brazo
político de ETA e igual que Batasuna y que no ha podido ilegalizarse porque el
fiscal general y el abogado del Estado, a las órdenes del Gobierno, no han
querido recurrirlo. Eso es un precio político. No hay mayor precio político
para ETA, no lo hay en este momento mayor, que el presentarse a las elecciones
en los ayuntamientos vascos. Eso no significa diálogo, lo que significa eso es
dinero de los contribuyentes para financiar el movimiento etarra, estatus para
sus concejales, oficinas, asesores, todo ello pagado por los contribuyentes,
poder y, por tanto, capacidad de control en sus pueblos, vuelta a la kale borroka y a no dejar libremente
vivir a la gente pacífica.
Si hablamos de diálogo, debo
decir que es una bella palabra y una gran realidad entre personas civilizadas,
entre personas que utilizan la palabra como medio de expresión y de
comunicación. Cuando la otra parte lo que utiliza es la metralleta y la bomba,
no hay posibilidad de diálogo. Si usted se pone a jugar una partida con un
señor que tiene una pistola debajo de la mesa y que está dispuesto a usarla si
no gana, pues ya sabe que no hay diálogo posible, porque en cuanto el otro vea
que va perdiendo, saca la pistola; y eso pasa siempre con los terroristas, con
ETA siempre pasa.
Entonces, con el caso De Juana Chaos, Otegi, las listas de ANV… ¿El
Gobierno sigue negociando con ETA?
El Gobierno no ha negado que lo siga
haciendo, lo niega sólo formalmente en el Parlamento, pero a diario nos
encontramos con manifestaciones y con expresiones que certifican que existe un
proceso, como le gusta llamar al presidente Zapatero, que tiene por base el que
no se levanta nadie de la mesa hasta que no se acabe. Y, claro, eso puede durar
años. ¿Cuántos muertos, cuántas T4 hay que poner sobre la mesa para que acabe
ese proceso? Yo recomiendo a sus lectores que vean la película El Lobo, que es la vida de un confidente
de los servicios secretos, real, que se infiltra en ETA y está presente cuando
un ideólogo de ETA decide dejar las armas y empezar el diálogo. En la reunión
en la que están dicen que se lo van a pensar y salen todos a pasear menos dos
que se quedan allí y le pegan un tiro en la cabeza al ideólogo que quería dejar
las armas. Ésa es la lección. Siempre habrá uno que se quede con la pistola.
Con los terroristas no vale más que imperio de la ley, jueces, fuerzas de
seguridad, cooperación internacional y cumplimiento íntegro de las penas.
Estamos de lleno en el juicio por el mayor atentado cometido en España.
Durante estas semanas ha habido declaraciones contradictorias de testigos y,
sin embargo, desde el PP se está muy callado. ¿Quiere decir eso que la versión
oficial es la fidedigna?
Nosotros tenemos todo el respeto que
tiene un partido político democrático por la actuación de los jueces y
tribunales y, mucho más, cuando está abierto el juicio oral. Me parece que
interferir ahora con comentarios y glosas no es propio de los partidos
políticos, es una labor muy propia de los medios de comunicación, que están en
su legítimo derecho y aun en su deber de hacerlo, pero los partidos políticos,
en este proceso, es mejor que estemos callados.
¿Mintió el PP del 11 al 13 de marzo?
No, y se ha
demostrado. No se necesita ningún informe de Díaz de Mera ni de la Policía,
porque hay dos informes del CNI, que estaba bajo mi dependencia, y que
desclasificamos para que todo el mundo conozca y que, por cierto, no sé por qué
no se recuerdan ahora, y en los cuales se dice que la versión de los servicios
secretos que se nos dio al Gobierno de la nación era que la autoría era de ETA.
8 peritos están realizando un informe en torno a los
explosivos utilizados en el atentado. Según algunas filtraciones a la
prensa, el informe indicaría que varios elementos de la dinamita que hizo
explosión divergen de la Goma 2 ECO y, en cambio, coinciden con la Goma EC
y con el Titadyn. ¿Este informe podría cambiar el transcurso del juicio?
¿Qué tendrían que decir ustedes?
No lo sé. No
lo sé. Sinceramente ya me pierdo en la polémica de los explosivos.
¿Y si el informe estableciera que los explosivos utilizados
en los atentados no son Goma 2 ECO?
Yo tengo
confianza en los tribunales y a los tribunales no se les engaña con facilidad y
ya el tribunal decidirá.
Entonces ustedes, una vez salga el informe y si éste indicara
que los explosivos utilizados no fueron Goma 2 ECO y que, por
tanto, ustedes no mintieron, ¿harían alguna valoración?
Que nosotros
no mentimos es un hecho palmario. Se dijo, por activa y por pasiva durante ese
fin de semana, por el PSOE y sus terminales mediáticos, que se trataba de
terroristas suicidas que llevaban unos pares de calzoncillos y que tenían
estrecha y directa vinculación con Al Qaeda. No hay un solo indicio en un
proceso de más de 20.000 folios, ni un solo indicio, que vincule Al Qaeda con
el 11 de marzo; nosotros no mentimos, nos limitamos a trasladar a la opinión
pública la información que nos daban los servicios policiales y los servicios
secretos.
¿Está garantizada la españolidad de Ceuta
y Melilla?
Absolutamente. Está en la Constitución
como cualquier otra parte del territorio nacional.
¿Cree que el actual Gobierno podría ceder ambas ciudades
autónomas a Marruecos?
No creo. Quebrantarían gravemente la Constitución, y lo saben muy bien.
¿Qué es lo que más destacaría de su etapa como ministro de Defensa?
El final de la mili. Había 1.200.000 jóvenes
en pos de la incorporación a filas, y más de un millón de insumisos y de
objetores. Alguno, estoy seguro, que echaría una copa por mí.
“¡Manda huevos!”, “¡Viva Honduras!”; ¿qué le dijeron en su casa después
de estos “lapsus”?
Pues reírse de mí, que para eso tengo
cinco hijos que son la mejor prensa que uno pueda tener. Y algunas veces me lo
recuerdan en algunas calles de España, es raro el día que no me lo recuerda
algún chaval.
En el caso de Honduras y El Salvador, ¿en qué estaba pensando
en ese momento?
Pues en los
dos sitios pero creí que estaba en Honduras cuando estaba en El Salvador. La
cara de los salvadoreños cuando dije Viva Honduras era espectacular, pero, en
dos fracciones de segundo, como eran tan disciplinados, contestaron Viva, aunque
es sabido que entre ambos países no hay muy buenas relaciones.
Recomiéndeme su obra preferida de Shakespeare.
"Mcbeth". "Mcbeth" es la mejor tragedia sobre
los excesos del poder y la tiranía, y es toda una reflexión para quienes
estamos en política. No hay que creerse los sueños de las brujas. En realidad,
no hay que creerse nunca casi nada, más que las cosas importantes y
trascendentes, y en uno mismo desconfiar mucho más.
Muchas gracias, señor Trillo.
Gracias a usted.