La importancia de las Comunicaciones en La Guerra de las Galaxias
¿Por qué derrotaron los Rebeldes a todo un Imperio Galáctico?
El complejo y eficaz sistema de comunicaciones que logran tejer los soldados rebeldes frente al poderoso y tirano Imperio Galáctico es, sin duda, la clave de la victoria para los aliados nómadas. También debemos resaltar que el motivo de las primeras victorias imperiales y, sobre todo, el dominio total del Imperio (salvo en grupos rebeldes que conformaban bolsas nómadas y que resistían al más genuino estilo germánico frente al Imperio Romano) se debía a su gran organización comunicativa. En una Galaxia donde las distancias ya no son una barrera y, cuando en todos los planetas existen tecnologías paralelas, salvo la Estrella de la muerte imperial, el avance en el campo de las comunicaciones es el desencadenante de la victoria de los rebeldes. Estos últimos consiguen interceptar un mensaje imperial en el que se describe la nueva y mortífera estación del Imperio. La princesa Lea consigue almacenar esa información en la memoria de un androide y, posteriormente, al descifrar el mensaje, es posible encontrar el punto débil de la estación imperial y, finalmente, las acciones heroicas de Locke Skalwalker y del capitán Han Solo conducirán a la victoria rebelde.
También es importante mencionar el papel que juegan las comunicaciones en su conjunto sin centrarnos solamente en el desenlace de la guerra galáctica. A lo largo del filme los avances de la comunicación son los más importantes, por encima de los superpoderosos lásers y armas intergalácticas. Respecto a la comunicación espacial, nos encontramos ante veloces naves que son capaces de transportarnos de un planeta a otro a una velocidad superior a la de la luz. Las transmisiones audiovisuales también son sorprendentes; atrás quedan Internet y el ciberespacio actuales. Para contactar con cualquier ser galáctico basta con una especie de móvil audiovisual (nada que ver con nuestros actuales smartphones, aunque sin duda estos serían sus antecesores). Pero, sin duda, quizá lo más significativo lo constituye el androide. Ordenadores pensantes y móviles que pueden almacenar multitud de información y que solo la muestran a la persona autorizada; aquí ya no sirven ni claves ni códigos secretos.
Volvamos ahora a referirnos al éxito de los aliados en la batalla final. Si somos buenos observadores, nos daremos cuenta de que los rebeldes conforman grupos de nómadas que tienen que ir trasladando su base de operaciones como medida de protección o bien, cuando esta es descubierta. Debemos reseñar que, si noes por una filtración o una casualidad, a nivel informático y/o de transmisiones, resulta imposible que los ejércitos imperiales den con ella.
La Guerra de las Galaxias engloba una especie de megainternet o megaciberespacio en el que todas las limitaciones actuales están solventadas. También refleja la idea cíclica de la historia, en donde todo imperio se ha creado, ha prevalecido y ha sucumbido, finalmente, frente a ataques, un tanto desorganizados, provenientes de distintos frentes y con una carga de valores morales o ansias de libertad, por lo general. A pesar de que esta película la enmarcamos en el género de la ciencia ficción, no podemos dejar de revisionarla o visionarla como, quizá, un presagio en el campo de la tecnología en un futuro no tan lejano...
Autor: Héctor Castro Ariño