'El análisis' (lunes, 11 de marzo de 2019)
Buenos días.
Hoy
se cumplen 15 años del atentado más sangriento sufrido en España. Era un 11 de
marzo del año 2004 cuando unos terroristas hicieron estallar diferentes bombas
en 4 trenes de la red de Cercanías de Madrid. Como consecuencia directa o indirecta de ese atentado
fallecieron 193 personas y más de 2.000 resultaron heridas. La autoría
intelectual de este atentado, así como el perpetrado en el Hotel Corona de
Aragón de Zaragoza en 1979, continúan siendo un
misterio, o no, a día de hoy. En el atentado de Zaragoza, cometido el 12
de julio de 1979, murieron 78 personas y 113 resultaron heridas a consecuencia
de un incendio provocado, tal y como reconocería el Tribunal Supremo en 2009,
¡30 años después del suceso!
La
matanza de Madrid no fue obra ni de radicales islámicos y, menos aún, del grupo
terrorista Al-Qaeda, como se nos ha intentado hacer creer durante años a los
españoles. De hecho, en la sentencia del juicio-farsa
por el 11-M ni se menciona a Al-Qaeda. A continuación voy a exponer 8
datos, que no opiniones, para que cada oyente pueda reflexionar y extraer sus
propias conclusiones:
Primero:
Los vagones donde explotaron las bombas comenzaron a ser desguazados al día
siguiente de los atentados, en lugar de conservarse intactos como pruebas para
el juicio así como para poder haber sido examinados minuciosamente para, entre
otras cosas, haber aclarado el tipo de explosivo que se detonó.
Segundo:
Al juez Juan del Olmo, magistrado que instruyó el caso, se le ocultaron datos
importantes como, por ejemplo, el informe que trataba el uso de móviles por
parte de organizaciones terroristas.
Tercero:
El Jefe del Grupo Local de Policía Científica de Alcalá de Henares y los
primeros policías que llegaron al lugar donde estaba estacionada la famosa furgoneta Kangoo, a partir de la
cual se procedería a las primeras detenciones, aseguraron que dentro del
vehículo no había nada. Sin embargo, el auto de procesamiento estableció que la
furgoneta contenía “61 evidencias”, entre las que se incluían detonadores y una
cinta coránica.
Cuarto:
Los perros policías no olieron ningún rastro de explosivo en la furgoneta.
Posteriormente aparecería un resto de Goma-2 Eco en la misma.